
EL ARTE PERDIDO DE LA DIGITAL: POR QUÉ TU PLAN DE MARKETING SE QUEDA CORTO (Y CÓMO ARREGLARLO)
En el frenético mundo del marketing digital, donde las tácticas brillantes y las herramientas deslumbrantes abundan, es fácil perder de vista lo más importante: la estrategia. Muchas empresas confunden una colección de tácticas con una verdadera estrategia digital, y es ahí donde comienzan los problemas.
Piensa en tu estrategia digital actual. ¿Es realmente una estrategia cohesiva o es más bien una lista de deseos de actividades de marketing? Si eres honesto, probablemente te inclinas hacia lo segundo. No te preocupes, no estás solo.
El problema es que en nuestra prisa por mantenernos al día con las últimas tendencias y plataformas, a menudo saltamos directamente a la ejecución sin tomarnos el tiempo para desarrollar una estrategia sólida. Es como intentar construir una casa sin planos; podrías terminar con algo, pero probablemente no sea lo que realmente necesitabas o querías.
Entonces, ¿qué distingue a una verdadera estrategia digital de una simple colección de tácticas? Una estrategia digital efectiva:
- Está alineada con los objetivos generales del negocio
- Tiene una visión clara de dónde quieres estar en el futuro
- Identifica a tu audiencia objetivo con precisión
- Define tu propuesta de valor única en el espacio digital
- Establece KPIs -o KRs- claros y medibles
- Proporciona un marco para la toma de decisiones
En Sanco, hemos perfeccionado el arte de la estrategia digital a través de nuestra metodología Digital OKR Power Up. Comenzamos con una fase intensiva de cocreación estratégica, donde reunimos a todas las partes interesadas para definir una visión compartida. Luego, utilizamos el marco de OKRs para traducir esa visión en objetivos concretos y resultados medibles. El resultado es una estrategia digital robusta que no solo se ve bien en papel, sino que realmente impulsa resultados.
Pero desarrollar una estrategia digital efectiva no es fácil. Requiere tiempo, pensamiento profundo y a menudo, decisiones difíciles. Aquí hay algunos pasos para ayudarte a elevar tu juego estratégico:
- Comienza con el final en mente: ¿Dónde quieres que esté tu negocio en 3-5 años? Tu estrategia digital debería ser un puente hacia ese futuro.
- Conoce a tu audiencia: No solo demográficamente, sino psicográficamente. ¿Cuáles son sus deseos, miedos y aspiraciones?
- Analiza tu competencia: No para copiarlos, sino para identificar oportunidades únicas en el mercado.
- Define tu propuesta de valor digital: ¿Qué puedes ofrecer en el espacio digital que nadie más puede?
- Establece objetivos SMART: Específicos, Medibles, Alcanzables, Relevantes y Temporales.
- Crea un mapa del viaje del cliente: ¿Cómo interactúan tus clientes con tu marca en el mundo digital?
- Prioriza tus canales: No necesitas estar en todas partes. Enfócate en los canales donde tu audiencia está más activa.
- Planifica tus recursos: ¿Qué habilidades, herramientas y presupuesto necesitas para ejecutar tu estrategia?
- Establece un proceso de revisión y optimización: Tu estrategia debe ser un documento vivo que evoluciona con el tiempo.
Una de las razones por las que muchas empresas luchan con la estrategia digital es que requiere un tipo diferente de pensamiento. En el mundo digital, necesitas ser ágil y adaptable, pero también tener una visión clara a largo plazo. Es un delicado acto de equilibrio.
Otra trampa común es confundir la estrategia con los objetivos. «Aumentar nuestros seguidores en redes sociales» no es una estrategia, es un objetivo. La estrategia es el plan de cómo vas a lograr ese objetivo.
También es crucial recordar que una estrategia digital no existe en el vacío. Debe estar integrada con tu estrategia de marketing general y, de hecho, con la estrategia general de tu negocio. La era de tratar lo digital como algo separado ha terminado.
Pero quizás el aspecto más desafiante de la estrategia digital es la necesidad de constantemente equilibrar el corto y el largo plazo. El mundo digital se mueve rápido, y es fácil quedar atrapado en el día a día. Una buena estrategia te mantiene enfocado en tus objetivos a largo plazo, incluso mientras navegas los desafíos diarios.
Al final del día, una estrategia digital sólida es tu brújula en el caótico mundo del marketing digital. Te ayuda a tomar decisiones informadas, priorizar tus recursos y mantener a todos en tu equipo alineados y moviéndose en la misma dirección.
Así que la próxima vez que te encuentres tentado a saltar a la última tendencia de marketing o a agregar otra táctica a tu ya sobrecargado plan, detente y pregúntate: «¿Cómo se alinea esto con nuestra estrategia digital general?» Si no puedes responder esa pregunta, es hora de dar un paso atrás y trabajar en tu estrategia.
Recuerda, en el marketing digital, la actividad no es lo mismo que el progreso. Una estrategia clara y bien pensada es lo que destaca a los verdaderos líderes digitales de los entusiastas. ¿Estás listo para elevar tu capacidad estratégica?